Todo lo que debes saber previo al Scouting Combine de la NFL

Más de 300 jugadores que aspiran ser elegidos para el Draft de la NFL se reúnen esta semana en Indianapolis para el Scouting Combine, una semana en la que los jugadores se someten a pruebas físicas, médicas y de rendimiento en el emparrillado, además de entrevistas, para ser evaluados por los 32 equipos de la liga.

En MARCA Claro te traemos la guía con lo más importante del evento, incluyendo los jugadores a seguir, el calendario de eventos y un poco de historia previo al inicio de las actividades en el Lucas Oil Stadium.

¿Por qué importa el Combine?

'Las Olimpiadas en Ropa Interior', bautizado así por el peculiar atuendo que lucen los jugadores, el Combine sirve para comparar cuantitativamente a los prospectos, además de que las entrevistas permiten conocer un poco más a los jugadores fuera del campo.

¿Por qué hay muchos detractores del Combine?

Porque en los noventa e inicios del nuevo milenio, cuando el evento comenzó a ganar popularidad, se dio demasiado interés a algunas mediciones, sobre todo la velocidad, lo cual ocasionó varios fracasos como Mike Mamula, Aaron Curry, JaMarcus Russell y Vernon Gholston.

Si bien el Combine ayuda a tener más datos de un jugador, las mediciones no siempre se trasladan al campo de juego y se deben de analizar los videos, factores extra y la forma en la que encaja en el equipo antes de elegir a un jugador.

Calendario de eventos

Las actividades que más llaman la atención son las pruebas en el campo de juego, que se realizarán en el siguiente horario:

Jueves 1: equipos especiales.

Viernes 2: linieros ofensivos y corredores.

Sábado 3: quarterbacks, receptores y alas cerradas.

Domingo 4: linieros defensivos y linebackers.

Lunes 5: defensivos secundarios.

¿Cuáles son las pruebas a seguir?

Las más llamativas son el sprint de 40 yardas y las pruebas en las que los quarterbacks lanzan y los corredores y receptores reciben. Sin embargo, una de las más seguidas por los evaluadores de talento es la de los tres conos, en la que ven la explosión, agilidad, explosividad y flexibilidad de los jugadores.

La mejor generación de quarterbacks desde el 2004, pero sin claro #1

Como cada año, los quarterbacks acaparan reflectores con equipos que buscan al 'salvador' de su franquicia. Este año no es la excepción y bien podrían haber seis elegidos en la primera ronda, cuyo desarrollo mucho dependerá de lo que suceda con los mariscales.

Josh Rosen (UCLA) y Sam Darnold (USC), de momento, lucen como los mejores prospectos. Darnold no lanzará, optando por esperar hasta su 'pro day' en USC, mientras que el pero de Rosen es su carácter que generan dudas de su liderazgo. Baker Mayfield está un poco atrás, pero hay ciertas dudas por su tamaño, más cerca de un Drew Brees o Johnny Manziel que de un Carson Wentz o Ben Roethlisberger, pero los más intrigantes son otro par.

Josh Allen tiene el físico de un mariscal tradicional, pero hay dudas de su puntería, sobre todo considerando que jugó en una escuela pequeña (Wyoming), mientras que el otro es Lamar Jackson. El ganador del Heisman en 2016 fue una amenaza tanto por aire como por tierra en su etapa en Louisville, pero tuvo problemas lanzando ante rivales de alto nivel como LSU, Clemson y Florida State. La mayoría de los equipos prefieren que las piernas sean un complemento, no lo que lo defina, por lo que su sesión de lanzamiento (si la llega a realizar, no ha confirmado) será de los eventos más vistos.

¿Quién podría ser el nuevo Alvin Kamara?

Los corredores, marginados del top 10 del Draft por buena parte de la última década (de 2006 a 2015, solo cinco fueron elegidos entre los primeros 10 y en 2013 y 2014 no hubo ningún corredor en primera ronda). Este año, Saquon Barkley de Penn State es considerado como el mejor prospecto en la posición y posiblemente en todo el Draft, pero detrás de él hay una gran cantidad de jugadores que estarán disponibles al final de la primera ronda o en rondas intermedias y podrían tener un impacto similar al que tuvo Alvin Kamara el año pasado con los Saints.

Derrius Guice (LSU), Ronald Jones II (USC), Mark Walton (Miami), Rashaad Penny (San Diego State), Kerryon Johnson (Auburn), Nick Chubb y Sony Michel (Georgia) y Royce Freeman (Oregon) buscarán dar un paso al frente y ponerse en el segundo lugar entre los corredores de este Draft.

¿Nos quedaremos sin receptores en la primera ronda?

2008 es el único Draft en el que no se ha elegido un receptor en la primera ronda desde la unificación de las ligas en 1970, aunque eso no quiere decir que no hubiera talento, ya que Jordy Nelson y DeSean Jackson, ambos jugadores de Pro Bowl, formaron parte de la clase 2008.

2018 podría seguir el mismo destino ya que no hay un claro líder en este grupo, por lo que Calvin Ridley (Alabama), Christian Kirk (Texas A&M), Dante Pettis (Washingto), Courtland Sutton (SMU) y James Washington (Oklahoma State) podrían verse beneficiados por un buen desempeño en Indianapolis.

¿Hay un Myles Garrett este año?

El primer pick de 2017, pese a las lesiones, fue una revelación con siete capturas en apenas 11 partidos. Este año no hay un prospecto de ese nivel entre los alas defensivas y linebackers externos, pero hay dos que podrían ser muy solicitados en el Draft: Bradley Chubb de North Carolina State y Marcus Davenport de UTSA, además de Arden Key, quien decepcionó en su último año en LSU.

Profundidad entre los profundos

El incremento constante del juego aéreo en la liga hace mayor la necesidad de tener más y mejores jugadores de la defensiva secundaria. Hay talento de primer nivel en los polifacéticos Minkah Fitzpatrick (Alabama) y Derwin James (Florida State), pero hay talento de primera ronda y profundidad en los córners con Joshua Jackson (Iowa), Denzel Ward (Ohio State), el velocista Donte Jackson (LSU), Isaiah Oliver (Colorado), Mike Hughes (Central Florida) y Carlton Davis (Auburn) entre los jugadores con evaluaciones de primera ronda.